Ir al contenido principal

Informante


Sigilosa se escabulle
Calladita te recorre
No respira, se encoje
Se llena del aire de tu boca
Se delata cual suspiro
Se esconde entre tu ropa
Te mira dormir
Te imagina soñar
Te contempla agachadita
Así me reporta sin desliz
La caricia que te envío
Y que te pica en la nariz



Comentarios

  1. Qué tierno lo de la caricia que te pica en la naríz.

    Besos

    ResponderBorrar
  2. Querida María:
    Gracias por visitarme siempre y ser siempre la primera (o bueno, casi ;))
    Un abrazo,
    Ana Rosa

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

Ensayo breve sobre la tristeza

Cuando luchamos para que las pequeñas y las grandes tristezas que nos acechan no se conviertan en un presente constante que nos nubla la mirada y nos achica el corazón, recurrimos usualmente a las lágrimas que no son otra cosa que tristezas en estado líquido que se expulsan por lo ojos. En otros casos nos construimos en el alma un cuartito secreto repleto de tristezas y al que acudimos a veces voluntariamente para sentirnos un poco solos y un poco vivos, porque las tristezas son manojos de sentimientos que en cierto momento nos permitieron hacernos un poco más humanos, un poco más sensibles y un poco más miedosos. Una tristeza no nos hace valientes, una tristeza nos insinúa con diplomacia lo débiles que podemos llegar a ser, lo vulnerable que se presenta nuestro corazón ante un hecho doloroso e irremediable como la muerte, lo implacable que es la realidad y lo desastrosos que pueden verse sus encantos cuando no llevamos puestos los cristales de la mentira. Cuando pienso en mis...

Palabras sueltas II

Elefante gris La vida es un elefante , la muerte , un cazador. El tiempo es una trampa incierta la verdad . Gris es el futuro , habilidosa la puntería . Inesperados los sucesos, sin esperanza el precipicio . Círculo Buscar, encontrar, perder... el amor sufrir, disfrutar, dejar... la vida Soñar, odiar, suceder... el destino amar, vivir, esperar... el vacío Esperanza Una esperanza pequeñita se despierta ya no se esconde más . Quiere hacerse grande y valiente, hasta que la sombra se termine de marchar. Grauer Elefant Ein Elefant ist das Leben, ein Jäger, der Tod. Die Zeit ist eine Falle, die Wahrheit, ungewiss. Grau ist die Zukunft, das Zielen, geschickt. Unerwartet ist das Geschehen, ausweglos, die Kluft. Kreis Gesucht, gefunden, verloren… die Liebe Gelitten, genossen, gelassen… das Leben Geträumt, gehasst, geschehen… das Schicksal Geliebt, gelebt, gewartet… die Leere Hoffnung Eine kleine Hoffnung wa...

Carmelo y su carnaval

Esta es la historia de Carmelo, un ciudadano simple, un hombre común y corriente, trabajador y honrado como muchos de los que habitan este país. Carmelo estaba por cumplir los 50 años y soñaba con el día de su jubilación. A pesar de tener una familia numerosa había ahorrado algún dinerito para cumplir con otro sueño: participar bailando de diablo en la entrada del carnaval en Oruro, su ciudad natal. Añoraba su terruño cada día como si fuese el último y recordaba con tristeza la hora en la que tuvo que dejarlo para buscar mejores condiciones de vida en la La Paz. Aunque llevaba mucho tiempo viviendo como un paceño más, Carmelo volvía a su tierra todos los años para convertirse en un despojo alucinado de las deslumbrantes carnestolendas de por allá. Como muchos otros orureños, bolivianos y extranjeros, se embelesaba, se fundía con la maravillosa fiesta y sobre todo creía sin dudarlo en los milagros de la Virgen del Socavón, a cuya devoción se ofrecían las danzas y los coloridos atuendos...